Zanguango (Flaco, disco 2) - Dónde andarás

Seguramente desde el momento de su llegada a este mundo es música, que no sangre, lo que corre por las venas de Tino. Prueben a dejar en sus manos una naranja, y verán como hace música con la naranja. Si en el conjunto están repartidos los instrumentos pero se halla una silla a mano, hará música con la silla.

Pero no recuerdo haberlo escuchado cantar en solitario. Sí lo escuché cantar más de una vez en los coros de la fiesta rociera que cada verano organiza "El Flaco", pero no soy capaz de separar una entre un concierto de voces. En esta canción, la pista 10 del último CD de El Flaco, podemos apreciar los matices que aporta la sensibilidad musical de Tino, con cierta influencia de la música latina a la que también es aficionado.

La letra me recuerda una frase atribuida a Unamuno, aquello de "mi mujer es mi costumbre", aunque dicha frase más bien parece un perverso resumen de la que escribió a la muerte de su esposa:

"[...] se me fue mi santa mujer (q.e.D.g.) que era mi costumbre y mi alegría, y me daba lo que siempre más me faltó: serenidad y contento de vivir. Nunca creyó en la muerte, como yo nunca he creído en la vida."

Al escuchar la música de El Flaco acompañada por la voz de Tino, sin embargo, se hace imposible no creer en la vida:

Dónde andarás
(J. Delgado, canta Tino)




Por las esquinas del cuarto de baño
encuentro todavía cosas tuyas,
tus peines con algún pelo castaño,
tu frasco de colonia me tortura.
Suenan aún los ecos del portazo
con el que subrayaste la ruptura
y quedan como testigos del fracaso
junto a la puerta restos de pintura.
Me habla de ti todo en la casa,
no sé dónde estar, salgo a la calle
en un momento de rabieta
y encuentro claustrofóbico el planeta,
se ha hecho sin ti tan chico que parece
que noto su curvatura en las chancletas.
En cambio tú, indiferente, dónde andarás
estas rebajas en que me echas en olvido,
en qué tienda de ropa te has metido,
quién estará guardándote las bolsas
mientras te estás probando los vestidos.