En esas habitaciones oscuras donde vivo
pesados días, con qué anhelo contemplo a
veces las ventanas. ---Cuándo se abrirá
una de ellas, y qué ha de traerme---.
Pero esa ventana no se encuentra, o yo no sé
hallarla. Y quizás mejor sea así.
Quizá esa luz fuese para mí otra tortura.
Quién sabe cuántas cosas nuevas mostraría.
Konstantino Kavafis.
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1 comentario:
Aquí se abren ventanas a diario, marino. Y todas aportan raudales de luz benigna. Celebramos las ventanas que tú abres.
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